Experimentar la cultura y el patrimonio de Marruecos con una visita a la Medina de Marrakech

Si buscas unas vacaciones de sol características, cultura y patrimonio y alojarse en una villa de Marruecos podrían ser para ti. Usted encontrará que hay muchas cosas que ver y hacer, especialmente en la capital de Marrakech.

Mientras que usted se hospeda en una villa en Agadir sin duda deberías pasar al menos un día explorando la Medina, en la ciudad. La antigua ciudad de Marrakech es un lugar emocionante para explorar, ofreciendo la oportunidad de experimentar la cultura y la historia de Marruecos en un solo lugar. Si quieres hacer algún recuerdo de compras durante tu estancia y no encontraste un lugar mejor, con zocos esparcidos a lo largo de las calles de la Medina.

Usted puede recoger artesanías, tejidos y delicias locales, dando la oportunidad de comprar un recuerdo de su viaje o recoger algunos regalos inusuales para su familia y amigos. Si te sientes mimado de elección cuando se trata de elegir una de las muchas villas Agadir disponibles para alquilar y luego debe seleccionar uno que permite un fácil acceso a Marrakech.

Una visita a Medina de la ciudad es mucho más que simplemente ir de compras, con un montón de lugares de interés históricos a buscar. Cuando entras en la Medina de sí mismo, usted notará que la antigua ciudad de Marrakech está rodeado por las murallas del siglo XII. El patrimonio de la ciudad no se detiene allí, con un montón de otros edificios de interés que cada uno representa una parte diferente del patrimonio de Marrakech.

Parada en la plaza principal de la escena es aconsejable, como usted puede encontrar uno de los artistas callejeros a mano para dar un espectáculo cultural único. Aunque las partes de la Medina pueden parecer lleno de gente, todavía hay áreas que usted puede visitar para algunos consejos más relajado.

Las tumbas de Saadian, ubicada en el jardín andaluz Arabo son uno de estos lugares. Los mausoleos están bellamente decorados y proporcionarán un Bienvenido descanso del ajetreo y el bullicio de los mercados.

Otra vista de es la mezquita de El-Mansour, que es conocida por sus minaretes llamativas. Si quieres ver la Medina - y de hecho Marrakech - en una luz alternativa entonces usted podría aventurarse al Palacio El Badi. La terraza en las ruinas de este palacio del siglo XVI ofrece vistas panorámicas de los tejados de la ciudad.